Siempre me ha intrigado que impulsó al hombre prehistórico a
pintar las paredes de las cavernas. Que raro sentimiento lo llevó a
horadar las piedras con signos y líneas.
horadar las piedras con signos y líneas.
Pintar tiene que ver más con ese ojo interior del ser que trata de
mirar el mundo con un ritmo distinto.
mirar el mundo con un ritmo distinto.
La pintura comienza por la mirada tanto del pintor como de aquel
que concentrado la observa. El hombre de las cavernas dejó su agitada
vida y se detuvo a mirar el mundo que le rodeaba, comenzó a descubrir
la belleza y el horror de ese espacio que lo habitaba y en el cual se
movía.
vida y se detuvo a mirar el mundo que le rodeaba, comenzó a descubrir
la belleza y el horror de ese espacio que lo habitaba y en el cual se
movía.
Alumnos.
El mundo comenzó por adquirir una acepción alejada del común
y que era menester traducir en líneas y colores, en una poética que
más que comunicar intentaba fijar el mundo desde la emoción de ese
milagro que es mirar.
y que era menester traducir en líneas y colores, en una poética que
más que comunicar intentaba fijar el mundo desde la emoción de ese
milagro que es mirar.
En la actualidad el arte ha buscado nuevos derroteros, ha cruzado los
limites, se ha mofado del espectador y ha hecho los mil y un malabares
estéticos, pero el artista sigue mirando al mundo con ese primigenio
limites, se ha mofado del espectador y ha hecho los mil y un malabares
estéticos, pero el artista sigue mirando al mundo con ese primigenio
asombro que se condensó en la mirada del hombre prehistórico.
Entra: La mirada
No hay comentarios:
Publicar un comentario